El crecimiento económico de Estados Unidos durante el primer trimestre estuvo muy por debajo de las previsiones. El producto interno bruto ajustado a la inflación creció a una tasa anualizada del 1.6% en el primer trimestre, según una estimación inicial que la Oficina de Análisis Económico publicó hoy. Eso estuvo por debajo del crecimiento del 2.2% que esperaban los economistas encuestados por FactSet.
La desaceleración reflejó en gran medida una reducción del crecimiento del gasto de los consumidores y de las exportaciones y de los desembolsos del gobierno.
En lo que va del año, las autoridades han señalado los sólidos datos económicos como una razón para mantener altas las tasas de interés mientras esperan señales de que la inflación esté regresando de manera sostenible a su objetivo del 2%. El crecimiento más lento de lo esperado del jueves podría indicar que la economía estadounidense no es tan fuerte como se pensaba anteriormente, lo que significa que podría ser más vulnerable a los shocks en el actual entorno de altas tasas de interés.
Podría llevar a los funcionarios de la Reserva Federal a recortar las tasas antes. El Comité Federal de Mercado Abierto del banco central se reunirá la próxima semana para revisar las condiciones económicas y si la política monetaria es apropiada.
Según CME Group, los inversores ahora están valorando una probabilidad de casi el 20% de que la Reserva Federal mantenga las tasas de interés estables hasta fin de año, en comparación con menos del 1% hace un mes.
Una desaceleración en el gasto en bienes, como automóviles y gasolina, lastró el crecimiento general. Los cambios en los inventarios de las empresas y el comercio internacional también desaceleraron la expansión del último trimestre, pero los economistas advirtieron que esas cifras pueden variar ampliamente a lo largo del año.
“Una disminución de los inventarios puede ser realmente una buena noticia para la economía”, dijo Teresa Ghilarducci, profesora de economía de la Nueva Escuela de Investigación Social de la ciudad de Nueva York. “Eso es un buen augurio para un aumento de la inversión el próximo trimestre”.
“Es demasiado pronto para lamentarse por la economía”, añadió.
