Se agregaron 151,000 empleos ajustados estacionalmente en febrero, informó el viernes el Departamento de Trabajo, ligeramente por debajo del aumento de 170,000 empleos que esperaban los economistas encuestados por The Wall Street Journal. Aun así, esa cifra fue mejor que los 125,000 empleos agregados en enero.
La tasa de desempleo, que se basa en una encuesta separada de las cifras de empleo, aumentó del 4% al 4.1%
Los economistas creen que los recortes de empleos del gobierno federal bajo Trump llegaron demasiado tarde en el mes para ser reflejados en las cifras de febrero. Pero el informe mostró una pérdida de alrededor de 10,000 empleos del gobierno federal durante el mes, inusual tanto porque es una disminución como porque es tan grande.
De esa cantidad, 3,500 empleos perdidos fueron en el servicio postal, donde el empleo a menudo oscila al alza y a la baja de un mes a otro. Los 6,700 empleos perdidos restantes representaron la mayor caída en más de dos años.
Los economistas de Morgan Stanley en un comunicado del viernes dijeron que no creían que la disminución fuera un reflejo de despidos, “sino que era en cambio el frente de la congelación de las contrataciones federales”. Trump puso en marcha una congelación de contrataciones el 20 de enero, el día en que asumió el cargo.
Los gobiernos locales añadieron 20,000 puestos de trabajo, aproximadamente la mitad de ellos en educación. Los gobiernos estatales añadieron 1,000 puestos de trabajo.
La atención sanitaria representó una gran parte del aumento del empleo en febrero, añadiendo 52,000 puestos de trabajo. Las industrias del transporte y el almacenamiento añadieron 18,000 puestos de trabajo.
Joe Brusuelas, economista jefe de RSM US, dijo que el informe mostró que la demanda subyacente de mano de obra se mantuvo fuerte en febrero. Pero advirtió que las medidas arancelarias de la administración podrían alterar eso en los próximos meses.
“Este podría ser el último informe de empleo que no se verá afectado por los cambios significativos en la política comercial que están en marcha”, dijo.
Los minoristas eliminaron 6,000 puestos de trabajo. Y el sector de servicios de alimentación y bebidas (principalmente restaurantes y bares) perdió 27,500 puestos de trabajo. Eso podría ser una indicación de que las restricciones a la inmigración están empezando a afectar la oferta de trabajadores en las empresas que dependen en gran medida de la mano de obra inmigrante.
Los economistas esperan que la combinación de despidos en el gobierno, la reducción de la financiación gubernamental, la incertidumbre sobre los aranceles y las restricciones a la inmigración afecten al menos temporalmente el crecimiento del empleo en los próximos meses. Aun así, algunos habían temido que se manifestara más debilidad en el informe de febrero. Los economistas de High Frequency Economics, por ejemplo, habían esperado una ganancia de solo 30,000 puestos de trabajo.
