PPI junio de EEUU +11.3% interanual frente al +10.7% esperado.
No son solo los consumidores los que están sintiendo los efectos del aumento de la inflación: las empresas se están viendo afectadas y los precios mayoristas aumentaron más de lo esperado en junio. El índice de precios al productor, o PPI, subió un 1.1% el mes pasado, por encima de las previsiones de un aumento del 0.8%. En términos interanuales, el índice saltó un 11.3% en junio, el mayor aumento desde el aumento, valga la redundancia, récord del 11.6% de marzo. y por encima de las previsiones de 10.7%.
“Los costos de producción más altos como resultado de los problemas de la cadena de suministro y los desequilibrios generales dentro de la economía siguen siendo una prioridad”, dijo Ian Lyngen, estratega de BMO Capital Markets.
Los precios de la energía impulsaron en gran medida el aumento y representaron más de la mitad de la ganancia mensual, dijo Michael Shaoul, director ejecutivo de Marketfield Asset Management. Shaoul espera que gran parte de estas ganancias se reviertan en el informe de julio, ya que los precios del petróleo han comenzado a disminuir gradualmente. Pero otros costos siguen siendo elevados, agregó.
Excluyendo los alimentos, la energía y los servicios comerciales, las categorías más volátiles, los precios al productor aumentaron un 6.4% año tras año sin desestacionalizar, ligeramente por debajo del aumento del 6.7% de mayo.
“Al eliminar estos componentes volátiles, el PPI parece haber alcanzado su punto máximo y está comenzando a revertirse, una señal reveladora de que la economía se está moviendo hacia el territorio del ciclo tardío”, dijo Peter Essele, jefe de gestión de cartera de Commonwealth Financial Network.
Una fase de ciclo tardío generalmente se caracteriza como una etapa en la que la economía comienza a sobrecalentarse, según el equipo de investigación de asignación de activos de Fidelity. En esta etapa, el crecimiento alcanza su punto máximo y la inflación se acelera.
Nota: “Ciclo tardío“, la última fase de la economía antes de una recesión, marcada por la desaceleración del crecimiento económico y los picos en los márgenes de beneficios, las ventas y los múltiplos de las acciones.
Los precios al consumidor se dispararon en junio, aumentando a un ritmo anual del 9.1%, la tasa más alta desde finales de 1981.
El aumento en ambos índices allana el camino para que la Reserva Federal siga aumentando agresivamente las tasas de interés. La probabilidad de un alza de 100 puntos básicos, o 1%, a fines de julio ha aumentado considerablemente después de las publicaciones, dijo Essele. Alrededor del 83% de los comerciantes ahora están teniendo en cuenta el aumento del 1%, a la herramienta CME FedWatch.
El PPI es ampliamente considerado como la versión comercial del índice de precios al consumidor o CPI. El índice mide el cambio en los precios de los bienes cuando salen de la fábrica.
